30 de mayo de 2010

Disfrutar aprendiendo

XXI Cursos de Verano UNED
ISABEL QUIÑONES/Madrid
La calidad y el aprendizaje, no están reñidos con el aspecto lúdico que pueden llegar a tener los Cursos de Verano, ya que en esta tradicional época los alumnos de las distintas universidades buscan la movilidad para asistir a unos cursos que marcan el final del año académico y son los entremeses de la época estival.

Consuelo Gómez, es la Directora de esta XXI Edición, que lleva por lema “El saber sin distancia”.

La actual situación económica, ¿ha condicionado en algo la organización de esta nueva Edición de Cursos de Verano?

R: Me parece muy importante destacar que nuestros patrocinadores, tanto a nivel institucional como empresarial, han seguido confiando en los Cursos de Verano de la UNED en estos momentos de dificultad económica. Y lo han hecho en la misma medida que durante los últimos años, lo que nos ha permitido no sólo mantener la oferta de la pasada edición en cuanto a número de cursos, sino también incrementar las sedes en las que se imparten, e incluso iniciar un programa de Cursos de Verano internacionales.

También desde la propia UNED se ha realizado un gran esfuerzo de financiación a través de la Sede Central y de los Centros Asociados, conscientes de la proyección que tiene nuestro programa de Cursos de Verano. El principio esencial ha sido el de mantener los índices de calidad que vienen caracterizando a nuestros cursos sin incrementar los precios de matrícula, que se han congelado para esta edición y a los que se han incorporado importantes descuentos.

Otra cuestión es la de la presencia del tema en nuestra programación. Una de las señas de identidad de nuestros cursos es la actualidad, y también el interés en que desde la Universidad se aporten respuestas y soluciones a las cuestiones que la sociedad demanda. Desde este punto de vista, desde el principio consideramos que la actual crisis geopolítica, financiera y económica debía ser uno de los temas protagonistas de nuestra edición, tanto desde el punto de vista del estudio de la actual situación como desde el planteamiento de estrategias y soluciones que puedan contribuir a dar respuestas a la misma, especialmente en el marco social y educativo.

La UNED cuenta este año con un amplio catálogo de cursos y sedes, ¿qué criterios siguen para la elección de las sedes y la selección de los cursos?

R: Afortunadamente nuestra Universidad cuenta con una gran implantación territorial a través de sus Centros Asociados, lo que nos permite contar con un gran número de sedes que ofrecen potencialmente todos los requisitos para poder impartir Cursos de Verano con garantías de calidad. Y no me estoy refiriendo sólo a la adecuación en cuanto a infraestructuras, sino también a su interés natural o patrimonial, o a la capacidad para poder acoger a un importante número de estudiantes. Todas estas cuestiones son esenciales para la organización de un curso de verano. El interés por ofrecer a nuestros estudiantes un servicio de calidad es, en este sentido, nuestro criterio esencial. Y ese mismo criterio es el que aplicamos para la selección de las numerosas propuestas de cursos que llegan hasta nosotros. La actualidad, la pluralidad, la variedad y el rigor académico y científico se convierten en este caso en los elementos esenciales del proceso de selección.

Además de los Departamentos académicos de la Universidad, ¿colaboran otros organismos o instituciones en el diseño y desarrollo de los cursos?

R: Nuestros cursos constituyen un reflejo de la propia actividad que nuestra Universidad desarrolla durante el año a través de sus Departamentos y sus Centros Asociados, pero también de las relaciones que mantiene a nivel institucional. Por eso cada edición celebramos cursos en colaboración con el Ministerio de Educación y con Instituciones Penitenciarias. Y también llegan hasta nosotros propuestas del máximo interés procedentes de Institutos Universitarios vinculados a la UNED, como el Instituto Universitario de Seguridad Interior o el Instituto General Gutiérrez Mellado. Y junto a ellas otras procedentes de diversas Institución interesadas en colaborar en el propio diseño de propuestas específicas de cursos.

¿Qué otras actividades se organizan alrededor de los cursos?

R: La oferta cultural y de ocio de nuestros Cursos de Verano es tan amplia y variada como su número de sedes. Cada una de ellas se esfuerza por programar en cada edición un importante número de actividades que sirvan de complemento a los cursos y que favorezcan el encuentro y el intercambio de ideas y experiencias entre estudiantes y profesores, al margen de las aulas. Conciertos, excursiones y visitas guiadas por parajes naturales o espacios dotados de valor artístico, exposiciones, coloquios, etc. llenan el verano universitario de nuestros cursos.

Dada la naturaleza -a distancia- de nuestra Universidad, ¿Se pueden seguir los cursos sin tener que desplazarse físicamente hasta las distintas Sedes?

R: Nuestra oferta es tan amplia en cuanto a número de sedes –47 en esta edición- que aproxima nuestros Cursos de Verano a un gran número de estudiantes sin necesidad de realizar grandes desplazamientos. Nuestro lema de la Edición 2010, “El Saber, sin distancia” intenta reflejar esta filosofía. No obstante, en los últimos años estamos realizando un esfuerzo para que la tecnología aplicada a la enseñanza, que caracteriza a nuestra Universidad, nos permita ofrecer a nuestros estudiantes nuevas posibilidades, como la de asistir a cursos por videoconferencia e, incluso este año como novedad, por web conferencia. Para que en todos estos cursos se conserve el espíritu que les caracteriza, ponemos a disposición de nuestros estudiantes un campus virtual que les permitirá acceder a los materiales del curso desde su ordenador e intercambiar ideas, opiniones y experiencias con sus compañeros y con los propios profesores.

¿Qué balance hace de la experiencia del desarrollo de Cursos de Verano en Centros Penitenciarios?

R: Sin duda altamente positivo. La colaboración con Instituciones Penitenciarias para la celebración de Cursos de Verano ha logrado crear un marco ideal para normalizar la vida académica universitaria en las prisiones. Además, la posibilidad –iniciada en 2008- de que estudiantes de la UNED puedan asistir también a estos cursos ha supuesto una excelente oportunidad para mejorar una realidad educativa diferente y compleja. Los crecientes índices de matrícula en este tipo de cursos constituyen un claro respaldo a las propuestas que se realizan cada año desde esta experiencia.

Los Cursos de Verano de la UNED cuentan habitualmente con la presencia de destacadas personalidades, expertos en diversas disciplinas, ¿quiere desvelarnos alguno?

R: El elenco de personalidades procedentes de la política, la judicatura, la ciencia y la cultura es numeroso en cada edición de Cursos de Verano. Y también en ésta. No haría justicia a todos si sólo mencionase aquí algunos de ellos. Y tampoco sería justa con el resto de los ponentes, pues todos aportan a nuestros cursos el saber, el rigor, la actualidad, la pluralidad y la calidad que nuestros cursos deben tener y que la sociedad nos demanda. En estos principios es en los que se basa nuestro modelo de Cursos de Verano.