"Poco importa que se nazca en el corral de los patos, siempre que uno salga de un huevo de cisne. Se sentía realmente feliz de haber pasado tantos trabajos y desgracias, pues esto lo ayudaba a apreciar mejor la alegría y la belleza que le esperaban. Y los otros cisnes nadaban y nadaban a su alrededor..."
El patito feo. Hans Christian Andersen.
Lo cierto es que de pronto surgía un nuevo cisne de papel. Erguido y digno. Lleno de colorido, laboriosidad y paciente arte, con el que los internos del Centro Penitenciario de A Lama en Pontevedra, obsequiaban -uno tras otro- a los ponentes del Curso de cine. Un recuerdo entrañable que ponian en las manos de los conferenciantes para que se lo llevaran más allá de los controles, muros y alambradas. Quien sabe guardando, entre sus pliegues, que recuerdos, sueños y esperanzas...
Foto cedida por Mónica Valderrama
Texto: Isabel Quiñones